Una (y no más) de triunfitos

Es la primera vez que hago esto, digo, dedicar un post entero a OT. Y la verdad es que no entiendo cómo no lo hice el año pasado que, aunque desafinaban, los concursantes dormían enroscados, y eso siempre da más juego.

Risto y sus ristadas

Espérate pingalera que igual que me voy, vuelvo

Este año en la academia reina el buenrollismo y el amor libre, y así vamos, que toda la responsabilidad de mala leche oterina recae/recaía en Risto, cuyos partenaires han demostrado ser totalmente incapaces de seguirle el rollo de señor oscuro. Esas discusiones espontáneas y nada guionizadas que mantenía con Noemí y su pinganillo eran altamente chusqueras, pero las disputas sociales con Jesús Vázquez me producían ganas de salir a la calle a hacer el mal. Alguna de estas habrá provocado que Risto no estuviera detrás del bonito ordenador decorativo durante la última gala. Pero fíjate qué cosas, que se va Ramoncín y quitan la silla, pero se va Risto y la dejan ahí para que se enfríe… o no. Risto, o más bien su papel, me caía bien. Veremos ahora cuáles son los vídeos de OT más vistos esta semana sin él y sus ristadas. Claro que ni eso les salvaba este año del desastre. Ahí van, ahorrándose galas y gastándose golpes de efecto.

En fin, esta semana han tenido que recurrir a (no tan)viejas (mini)glorias a ver si las actuaciones no eran tan soporíferas. Espero que se hayan dado cuenta de que Fever no mejora cuando pones a Chipper en ella, y que no por conocida la canción provoca menos sueño. Al glorioso pasado me remito, que había un tiempo en que nos podíamos permitir algunas fantásticas cutreces insuperables:

¿Y me lo ha parecido a mi pero Sandra, Bustamente y Lorena se han comido con patatas a sus triunfitos? Con la pareja Soraya/Mario el último me ha sorprendido positivamente, fíjate, y a Víctor creo que le ha sentado mal tanto revival pre-eurovisivo, tiene huevos la cosa.

Como al no estar Risto las valoraciones del jurado parecían una versión de The sound of music, nadie ha dicho nada (de las patatas con las que los otros se las han comido), aunque con esa de Dos hombres y un destino me lo he vuelto a pasar teta. Dios, las comparaciones son odiosas. ¿Realmente hacía falta eclipsarlos tanto?

Y como aún no había dicho nada sobre OT, también debería apuntar hoy que sí, que es altamente perturbador que algunos triunfitos no tengan pajolera idea de quién es Bruce Springsteeen, así que, ya que nos hemos escandalizado, igual deberíamos comprobar que conocen de la existencia de otros grandes como José Guardiola o El Fary. Además, quisiera recordar que Víctor no sabía que With a little help from my friends es de The Beatles, por mucha versión Joe Cockera que se marcara. Os dejo con la primera vez que escuché la susodicha versión.

Por cierto, se ha largado Silvia.